En la zona HJK


¡Que emoción! Por primera vez estoy en Europa. 

Viajo con dos amigas, mi mejor amiga, Pili, y su mejor amiga de la universidad, Vic, y luego de varios meses de preparación (y ahorro) ... no podemos creer que al fin hemos llegado.

El viaje fue más corto de lo que esperaba, 10 horas de Costa Rica a Madrid-Barajas y 2 horas más de Madrid a París, volando con Iberia.

Fue de noche, así que no lo sentí largo, dormí casi todo el vuelo hasta Madrid, a excepción de algunas interrupciones por la española sentada junto a mí, quien no podía soportar que Pili, del otro lado del pasillo, abriera varias veces la escotilla de la ventana para admirar el amanecer. Lo cual, supongo, para ella no tenía nada de espectacular y era obvio que no merecía dejar entrar tanta luz para simplemente ver el sol.

Luego en el vuelo a París, aprovechamos para practicar el vocabulario básico en francés, con la frase inicial Je ne parle france, ya que según se dice los franceses tienen fama de solo hablar en su idioma (y luego descubrimos que en la mayoría de los casos en cierto).

Antes, hicimos la escala en el aeropuerto de Barajas y nos "divertimos" paseando (entiéndase que literalmente corrimos como locas de un lado a otro) por toda la zona H-J-K, ya que las pantallas y los mostradores de atención no se ponían de acuerdo en la puerta de embarque para el vuelo a París (debido a una remodelación), fue un preámbulo de todas las largas caminatas que tuvimos durante el viaje completo. 

En el resto del viaje o al menos durante la primera semana, volvería locas a Pili y Vic, al repetir constantemente la frase “en la zona HJK” con entonación de altoparlante del aeropuerto de Barajas y fue muy divertido... al menos para mí.