Más de Burano

¿Sabías que hay frutas ticas de venta en Venecia? ¡Yo no lo sabía!

Nos llamó la atención un puesto de frutas que estaba en la calle, porque tenía unas frutas extrañas similares a las naranjas pero desconocidas para nosotras, con un rótulo que anunciaba: 'de Costa Rica', seguramente eran famosas pero ninguna de las 3 había visto esa fruta antes.

Pili tomó una para hacer la consulta, pero el vendedor se enojó mucho (ella no vió el rótulo que Vic y yo sí vimos y comprendimos: 'non toccare') y solo acató a preguntar el precio ante la actitud del verdulero ... así que nunca supimos que era aquella fruta costarricense tan extraña, ha de ser una de esas frutas tropicales exóticas que las producen solo para exportación.

Seguimos caminando y era inevitable observar que habían muchos señores conversando en las calles, luego nos dimos cuenta en dónde estaban las señoras, venían saliendo de misa (un martes?), demasiado convencional (o machista) para nuestro gusto.

En fin ... Esperamos el vaporetto de regreso, comiendo barras de granola en una banca cerca del muelle, para viajar de vuelta a Venecia. El movimiento constante de las paradas donde se estaciona el barco me acasionaba mareo, así que yo esperaba en tierra firme y luego ingresaba a la parada una vez que llegaba el barco.