

Regresamos de nuevo a Campo Santa Margarita, en nuestra parada del vaporetto: Ca'Rezzonico, y aunqe nos perdimos un poco para llegar al hostel, al fin y al cabo llegamos. Nuestra cena fue Pizza Al Volo para llevar (solo venden para llevar, je, je), comimos de nuevo sentadas en una banca, admirando la noche ... la primer noche en Venecia ... tenía buen sabor, y seguíamos admiradas al igual que en París, de estar en Europa, que ¡gran bendición!.
Había gran movimiento nocturno frente a nosotras, bares y restaurantes, con sus mesas en la plaza, concurridos por mucha gente joven, luego nos esteramos que estábamos en lo zona donde está el mejor "ambiente", que buena casualidad.
Nos fuimos a dormir a eso de las 10pm, aunque las otras 3 camas de nuestra habitación estaban ocupadas, nunca vimos a sus ocupantes, ya que llegaron quién sabe a qué hora de la madrugada, yo estaba profundamente dormida (eso no es ningún problema para mi) y no me di cuenta de nada. Hacia calor, así que no fue necesario la sábana y mucho menos la cobija.